crimen ejemplar

  PERSONAJES
 
1. ¿Cómo es el protagonista? ¿Cómo se presenta? ¿Tiene que ver su carácter con el desenlace del relato?.
Al principio del relato el protagonista parece ser un hombre formal, es decir, el acude a la cita con Héctor y por mucho que éste no llegue él le espera varias horas hasta que se presenta. Dice que lo hace porque es un hombre al que le gusta cumplir con su palabra, tal y como se define él “un poco chapado a la antigua”.


   
 
2. ¿Y Héctor? ¿Te lo imaginas? ¿Es un personaje opuesto al protagonista? Descríbelo brevemente.
Héctor parece ser un personaje totalmente opuesto al protagonista, ya que es un hombre impuntual y que por lo que parece no es demasiado responsable ya que se presenta casi dos horas más tarde a su cita.


   
  NARRADOR
 
3. ¿En qué persona está narrado el texto? ¿A quién se dirige con sus palabras el narrador? Subraya todas las referencias que hace a los lectores.
El texto está narrado en primera persona y parece que le cuenta este suceso a un inspector de policía que lo está interrogando por el asesinato de Héctor.


Que yo sea puntual en la citas no obliga a los demás sino hasta cierto punto; pero ustedes reconocerán conmigo que ese punto existe. 
Es natural que ustedes se pregunten por qué no lo dejé plantado.
Pero ésas son cosas del destino y les aseguro que a las tres de la tarde…

   
  ESPACIO
 
4. Describe el espacio en el que sucede la historia. ¿Cómo está el día?
La historia sucede en la esquina de la calle Venustiano Carranza y San Juan de Letrán, donde se encuentra durante todo el relato el protagonista esperando a que su cita llegue.

       TIEMPO
 
5. Subraya todas las referencias temporales que aparecen en el relato. ¿Es importante el transcurso del tiempo para la historia? Explícate bien
Me había citado a las siete y cuarto en la esquina de…
Las sietes y media, las ocho menos veinte, las ocho menos diez. Las ocho.
Héctor me había citado a las siete y cuarto y no me cabe en la cabeza faltar a una cita.
Las ocho y cuarto, las ocho y veinte, las ocho y veinticinco, las ocho y media, y Héctor sin ven
Pero ésas son cosas del destino y les aseguro que a las tres de la tarde…
Las nueve menos veinticinco, las nueve, menos veinte, las nueve menos cuarto.
Llegó a las nueve menos diez.

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